sábado, 19 de julio de 2008

Fragmento

Estaba perdido en Central Park, sabía que era un sueño porque yo nunca había estado allí. Un par de años después estuve en Nueva York y me acordé de este sueño, de hecho todo el tiempo que pasé en Nueva York fue como recordar este sueño y, bueno, supongo que no se puede decir nada mejor de una ciudad.
El caso es que estaba en Central Park antes de haber estado allí nunca y de pronto aparecía Lennon. Nada más verle pensé: bueno, definitivamente esto es un sueño, porque este tío está muerto, pero como me encantaba eso de encontrarme con Lennon en el parque decidí seguir como si no me diese cuenta.
- ¿Qué tal te va, chico?
- Coño, usted es Lennon.
- Eso ya lo sé, te preguntaba qué tal te va.
- Bien, supongo. Pero usted está muerto.
- Ya lo sé, aunque a decir verdad no me gusta demasiado que me lo recuerden.
- Ya me lo imagino. Supongo que debe ser una putada, me refiero a que te maten de una manera tan idiota.
- Sí que es jodido, pero son cosas que pasan, me siento un poco como Jesse James, asesinado por un miserable que quería alcanzar la gloria de un asesino de niños.
- Bueno, al menos seguirás viviendo aquí, en los sueños de todos los adolescentes.
- Eso suena muy bonito, suena como si llevases diez años sin echar un polvo.
- Es curioso, hace poco soñé con Lou Reed y me dijo lo mismo.
- Ya, me imagino que lo habrías metido en algún vagón de metro.
- Sí, en realidad viajaba encima de un vagón de metro amarillo.
- Supongo que también te pidió que lo sacases de tus sueños lo antes posible.
- La verdad es que sí.
- Bueno, chico, resulta un poco violento, pero lo cierto es que me gustaría pedirte lo mismo.
Después de que Lennon se fuese me quedé un buen rato en el parque, pensando en mis cosas. La verdad es que aunque parezca un poco idiota me gusta soñar con estrellas de rock and roll y ni siquiera les tengo en cuenta la prisa que tienen todos por largarse de mis sueños.

Ray Loriga, "Héroes".

miércoles, 9 de julio de 2008

Estrenando

Panopticon, del griego "pan" (todo) y "optikós" (visión). Observar sin ser observado. Omnipotencia y ubicuidad, dos de los atributos divinos más deseados por el ser humano, resumidos en un mismo concepto. 1984, el maldito experimento sociológico Gran Hermano, hasta la mismísima Matrix: todos ellos derivados de la misma noción de poder absoluto sobre el resto, hasta llegar al mal llamado estado de derecho en el que nos encontramos.

Es voluntad del autor rellenar este espacio con todo aquello que sea susceptible de comentarse derivado de la observación y la reflexión personales. Sirva así de excusa para obligarme a escribir, por otro lado.

Pasen, lean y opinen. Y no olviden tirar de la cadena una vez hayan acabado.